Compota de boniato y membrillo de Alcalá de los Gazules
Receta de compota muy especial para mí. Son los sabores de toda la vida, los
recuerdos de la infancia que nos emocionan, porque vienen acompañados de los
besos, los achuchones o abrazos, de tanto amor recibido…
Desgraciadamente, esta elaboración también tendrá para mí un recuerdo muy triste que siempre me acompañará. Cuando la hice a mediados del pasado mes de diciembre, reservé una parte y se la llevé a mi queridísimo amigo Paco. Sacerdote ejemplar que vivió transmitiendo el evangelio de Jesús, no solo con la palabra, sino con su testimonio de vida. Creó una comunidad viva, comprometida con el mensaje de Jesús de Nazaret. Amar al otr@ compartiendo lo que somos y lo que tenemos. A los tres días de haber estado con él en su casa, hablando largo y tendido como hacíamos habitualmente, nos vimos de nuevo en misa, ya que era domingo. Por la tarde sufrió una caída en la calle cuando se dirigía a visitar personas mayores o vulnerables, que debido a la pandemia no asistían a la eucaristía, y pasados solo cuatro días, se marchó. Estoy tremendamente agradecida por haber tenido la gran suerte de conocerlo. A pesar de la diferencia de edad, teníamos muchas cosas en común, más allá de compartir una misma fe. Ahora me refugio en tantas horas compartidas, de las que él me decía: Emma, tú y yo, ya hemos solucionado los problemas del mundo, y a reír los dos. Ya le comenté al obispo de la diócesis, que lo tiene muy difícil para encontrar un sacerdote que se aproxime a la dimensión humana, de servicio, generosidad, acogida… Paco es irrepetible; sus recursos económicos personales estaban al servicio de los más necesitados. Los profetas no abundan, y él lo fue y lo seguirá siendo para todos los que formamos parte de la comunidad que dejó.
Esta receta se iba a quedar aparcada para el próximo otoño, pero viendo que en la sierra de Cádiz, a la fecha que estamos, todavía hay maravillosos membrillos, no como los que tiene a la venta unas grandes superficies que todos conocemos. Al final he decidido publicarla, creo que este es.su momento. Es una elaboración muy sencillita de hacer. No es el concepto de compota muy dulce al que estamos habitualmente acostumbrad@s. El vino que he utilizado está a mitad de camino entre un oloroso y un moscatel de Málaga. He respetado cómo se hacía esta receta en casa de mis padres, solo he modificado el uso del agua del grifo por agua mineral, y no es un capricho, merece la pena. Si en tu zona dispones de un agua fina, no dudes en utilizarla. En la zona de Alcalá, Casasviejas, parte del parque natural de Los Alcornocales, se continúa haciendo esta compota, tanto en casas particulares, como sirviéndolas en ventas, que es como por aquí se les llama a los restaurantes de carretera.
Desgraciadamente, esta elaboración también tendrá para mí un recuerdo muy triste que siempre me acompañará. Cuando la hice a mediados del pasado mes de diciembre, reservé una parte y se la llevé a mi queridísimo amigo Paco. Sacerdote ejemplar que vivió transmitiendo el evangelio de Jesús, no solo con la palabra, sino con su testimonio de vida. Creó una comunidad viva, comprometida con el mensaje de Jesús de Nazaret. Amar al otr@ compartiendo lo que somos y lo que tenemos. A los tres días de haber estado con él en su casa, hablando largo y tendido como hacíamos habitualmente, nos vimos de nuevo en misa, ya que era domingo. Por la tarde sufrió una caída en la calle cuando se dirigía a visitar personas mayores o vulnerables, que debido a la pandemia no asistían a la eucaristía, y pasados solo cuatro días, se marchó. Estoy tremendamente agradecida por haber tenido la gran suerte de conocerlo. A pesar de la diferencia de edad, teníamos muchas cosas en común, más allá de compartir una misma fe. Ahora me refugio en tantas horas compartidas, de las que él me decía: Emma, tú y yo, ya hemos solucionado los problemas del mundo, y a reír los dos. Ya le comenté al obispo de la diócesis, que lo tiene muy difícil para encontrar un sacerdote que se aproxime a la dimensión humana, de servicio, generosidad, acogida… Paco es irrepetible; sus recursos económicos personales estaban al servicio de los más necesitados. Los profetas no abundan, y él lo fue y lo seguirá siendo para todos los que formamos parte de la comunidad que dejó.
Esta receta se iba a quedar aparcada para el próximo otoño, pero viendo que en la sierra de Cádiz, a la fecha que estamos, todavía hay maravillosos membrillos, no como los que tiene a la venta unas grandes superficies que todos conocemos. Al final he decidido publicarla, creo que este es.su momento. Es una elaboración muy sencillita de hacer. No es el concepto de compota muy dulce al que estamos habitualmente acostumbrad@s. El vino que he utilizado está a mitad de camino entre un oloroso y un moscatel de Málaga. He respetado cómo se hacía esta receta en casa de mis padres, solo he modificado el uso del agua del grifo por agua mineral, y no es un capricho, merece la pena. Si en tu zona dispones de un agua fina, no dudes en utilizarla. En la zona de Alcalá, Casasviejas, parte del parque natural de Los Alcornocales, se continúa haciendo esta compota, tanto en casas particulares, como sirviéndolas en ventas, que es como por aquí se les llama a los restaurantes de carretera.
Ingredientes.4-5 p. T. elaboración 30 min.
2 membrillos g limpios y troceados.
100 g higos secos.
75 g ciruelas pasas.
75 g orejones.
75 g pasas.
1 rama de canela.
1 piel de naranja.
100 g azúcar moreno.
3 anises estrellados.
4 g, cardamomo.
150 mL Cream Jerez dulce.
Agua mineral (opcional).
Ingrediente presentación.
Modo de hacerlo.
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Ya tenemos todos los ingredientes que vamos a utilizar preparados. Es importante que tanto el boniato como el membrillo no estén troceados muy pequeños, así evitaremos que se deshagan y pierdan presencia a la hora de emplatar. Vamos para el fuego con ello.
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En una olla ponemos el membrillo, boniato, la rama de canela troceada, el anís estrellado, el cardamomo, la piel de naranja, el azúcar, y ahora solo queda cubrir de agua discretamente. Mantenemos en f. m. 8 min aprox. Cubrir no del todo.
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En este paso valoramos que tanto el membrillo como el boniato estén a la mitad de camino de resultar tiernos.
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Ahora es el momento de incorporar el vino, seguido de los frutos secos.
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Ya tenemos todos los ingredientes dentro de la olla. Ahora toca esperar a que los frutos secos se hidraten un poco, y el boniato junto con el membrillo se ablanden, pero sin perder su forma, que no se deshagan. Mantener en f. m. suave. Mover con suavidad la olla sin introducir en ella ningún elemento para hacerlo.
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Se ha reducido el líquido o semi-almíbar lo suficiente para que se concentren los sabores, y nos permita mantener durante unos días esta compota en perfecto estado de conservación. Observar como se ha llegado al final de la cocción sin que se deshagan los ingredientes.
Propuesta de presentación.
Yo he elegido unas nueces picaditas para el momento de llevar a la mesa. Me
gusta ese crujiente sobre la compota, resulta muy agradable.
Consejos y sugerencias.
Para su buena conservación es imprescindible que la compota quede lo más
cubierta posible por el almíbar, y a poder ser en envase de cristal con buen
cierre.
¡Vaya por Dios, Emma! Qué triste noticia, la pérdida de tu amigo seguro es para ti tan dolorosa como la de un familiar, cuando se tienen lazos tan estrechos como los que compartíais en la parroquia, se llega a crear un vínculo más fuerte que el que une la propia sangre. Una persona así, es un tesoro, no todos los que nos rodean lo son, por eso ahora te quedarán los recuerdos de esos momentos en la Fe, qué tanto bienestar te produjo al estar junto a él.
ResponderEliminarEsta compota te ha quedado de lujo, yo he teñido membrillos hasta hace un par de semanas, y aunque me encanta el boniato, nunca los he combinado en la misma compota. Gracias por compartirlo, pues seguro lo haré en cuanto vuelva a conseguir membrillos de primera.
Besos y hoy más que nunca, un fortísimo abrazo.
Querida Concha, muchas gracias por tus cariñosas palabras. Para mi ha sido y seguirá siendo el hermano mayor que nunca tuve. A pesar de la gran diferencia de edad, no era una persona desplazada en el tiempo, sino todo lo contrario, adaptado a los momentos históricos que vivimos, al progreso, la ciencia, y sobre todo la gran capacidad de escuchar, desde el respeto y la tolerancia. Cuando quedábamos, disfrutábamos tanto de nuestra conversación, que el reloj no existía.
EliminarConcha te animo a que pruebes esta compota con boniato incluido, y sobre todo el toque aromático del cardamomo junto con el anís estrellado, está riquísima.
Que pases un buen día. Bstes.
Un plato muy original, es la primera vez que lo veo
ResponderEliminarBsss
Gracias por tu visita. Un saludo.
Eliminar¡¡Hola Emma!! Cuánto siento tu pérdida, y más cuando se trata de una persona que deja huella, que tiene un discurso que convence y buenos sentimientos, creo que hace mucha falta en estos días en el que la gente se mira tanto el ombligo y es tan intolerante, personas así. Yo no soy creyente, bueno, me he dejado de plantear si creo en dios o no, pero sé lo importante que es esa creencia para algunas personas, y por supuesto, mi gran respeto, creo que las personas que creen en algo (algo bueno, claro está), se recomponen mucho antes a la dureza de la vida, comprenden mejor sus designios y es una gran paz para el alma. También creo en las personas como tu amigo, ensalzan aquello en lo que creen y ayudan realmente a las personas con su discurso y su buena fe. Yo he tenido también la suerte de conocer algunos párrocos así (pocos, pero los hay, pues no dejan de ser también hombres). Es una lástima que hombres tan válidos para la iglesia se vayan antes de tiempo. De verdad que lo siento mucho, una gran pérdida, es como si siempre se fueran primero los buenos.
ResponderEliminarY qué mejor que recordarlo plasmando cómo era en este espacio tuyo, y con una receta que te trae tan buenos recuerdos.
He comido compota de membrillo por primera vez hace bien poco, desde este otoño y me sorprendió precisamente para bien. Era mucho más pobre en ingredientes que la tuya, así que ya puedo imaginar lo riquísima que tiene que estar la que nos traes, acompañada de boniato, ¡riquísimo! Un lujazo de compota que entiendo que se siga haciendo por la zona, no es para menos. Gracias por compartir. Besitos.
Muchas gracias Isabel. Dices no ser creyente, quizás sin saberlo formes parte del proyecto de Jesús de Nazaret. Si trabajas por una sociedad más justa para todos, por un mundo donde no existan los excluidos, y si te duelen las desigualdades, tu y yo remamos en la misma dirección. La fe no es ir a misa para cumplir un precepto. La fe es vivir con la generosidad de ser útil a los demás.
EliminarLa compota de boniato y membrillo está riquísima. Seguro que tu le añadirías más azúcar. Bstes.
Es muy bonita la historia que nos cuentas y una gran pérdida la de Paco, cuando encuentras un sacerdote de esas características te hace creer que aún existe gente de buena fe que ayuda a los demás de un modo desinteresado.
ResponderEliminarLa compota con boniato no la he probado nunca, pero me gusta mucho la pinta que tiene y siendo un postre de tradición familiar no debe perderse nunca.
Besos.
Muchas gracias Ana. Paco no era un sacerdote protagonista en la comunidad, era uno más entre tantos. Difícil, por no decir imposible encontrar una persona como Paco. Pasó por la vida haciendo el bien, siempre dispuesto y pendiente de tod@s.
EliminarAnímate Ana con esta compota, seguro que te va a quedar de diez. Bstes.
Hola Emma, recibe un abrazo de ánimo en estos tristes momentos.
ResponderEliminarUna preparación que llama la atención. Tiene que estar riquísima a juzgar por las imágenes y por el proceso que nos has detallado. Me tomaría muy a gusto un buen cuenco.
Besos
Muchas gracias Pedro por tus amables palabras.
EliminarLástima que estemos tan lejos, porque seguro que disfrutarías de ese cuenco que mencionas. Bstes.
Hola Emma, gracias por el mensaje que me dejaste ahora te entiendo. Lo siento muchísimo pues se pasa muy mal cuando alguien querido se va así de repente, cuesta asimilarlo y aunque la vida continúa el camino se hace más difícil. Nos quedan los recuerdos de los momentos vividos con ellos, que estoy segura que nunca olvidaremos. Imagino como le gustaría esta rica compota que le obsequiaste porque se ve deliciosa. Por aquí por desgracia no hay esos ricos membrillos solo los insípidos de las grades superficies, que alguna vez compro para después arrepentirme.
ResponderEliminarUn abrazo enorme corazón.
Muchas gracias Manoli. Tu también estás viviendo el desgarro emocional de perder a una amiga, Difícil recorrido nos queda, pero hay que hacer el camino. Paco era un goloso que entraba en competencia con el super-goloso de mi marido, Así que determinados dulces o postres van a quedar de momento en standby.
EliminarMe alegra que te haya gustado esta compota.
Un abrazo. Cuídate.
Cuánto lo siento Emma!!
ResponderEliminarVengo del Blog de Manoli que también ha perdido a su amiga y ahora te leo a ti. Una pena muy grande y más de la manera que se ha ido.
Seguro que desde arriba te estará agradeciendo tus palabras y esta rica compota.
Has hecho muy bien en publicarla.
Gracias a dios donde yo vivo tenemos un agua de muy buena calidad. Yo la bebo directamente del grifo y ni diferencia tiene de la embotellada.
Pero ya se sabe que no todas las zonas es igual.
Besos y mucho ánimo ♥
Seguro Pepi, era un ser tan especial, tan enriquecedor y afable, que tengo la sensación que no es pasado en mi vida, sino presente y futuro.
EliminarEl agua por aquí es potable al cien por cien, pero bastísima, y esto altera el resultado de determinadas elaboraciones.
Muchas gracias por tus palabras y visita a mi cocina. Bstes.
Siento tu pérdida, lo se por experiencia de amigos que se han ido y es igual de dolorosa que la de un familiar. Todo mi cariño para ti.
ResponderEliminarEsta compota, o parecida, la suelo hacer también en otoño y en invierno, en Navidad es obligada, no le pongo boniato, pero sí casi todos los ingredientes que apuntas. Es riquísima.
Un beso.
Lola, Paco era el amigo de amigos con el que compartes muchísimas cosas. Han sido fechas muy especiales donde la familia se reúne alrededor de la mesa, y él no pudo estar ahí.
EliminarEsta compota con la mezcla de boniato y membrillo, más el sabor peculiar del cardamomo, junto con el anís estrellado, es maravillosa.
Que tengas un buen día. Bstes.
Emma lamento muchísimo tu pérdida. Esas ausencias son difíciles de asimilar. La receta me recuerda a la compota que preparaba mi abuela cuando yo era niña. Me guardo tu entrada ¡Besos mil!
ResponderEliminarGracias Cuca. Las ausencias de los seres queridos siempre son muy dolorosas. Celebro que la receta te traiga recuerdos amables.
EliminarQue pases un feliz finde con las peques. Bstes.
Hola Emma, siento mucho la pérdida de tu amigo Paco. Una gran persona que seguro que allá donde esté sigue haciendo cosas grandes como las hizo aquí con las personas cercanas. Los amigos son un gran regalo que cuando nos dejan, nos rompe un pedacito de corazón. Lo bueno es que quedan los recuerdos y eso nos hace sonreír cada vez que lo recordamos. D.E.P.
ResponderEliminarLe has dedicado una dulce receta, como son tus recuerdos con él. Estará muy contento. Desde luego esta compota tiene que estar deliciosa. Me ha encantado cómo la has explicado y todos los ingredientes que has agregado son deliciosos para mi paladar.
Un achuchón fuerte. Mis condolencias nuevamente.
Sil
Sil, muchas gracias por tus cariñosas palabras. Conocidos podemos llegar a tener muchísimos, pero amigos, con lo que esa palabra evoca, son muy pocos. Es verdad que cuando un amigo del alma se marcha, deja un enorme vacío en nosotros, que siempre nos acompañará.
EliminarQue pases una buena semana. Bstes.
Hola Emma. He sentido mucho esa perdida que has tenido no hace mucho tiempo. Aunque no se trate de un familiar por lo que he leído tenías con él un trato más allá de lo familiar. La diferencia de edad cuando hay un proyecto y cuando hay una misma Fe no existe y tu lo has reflejado a la perfección en lo que has escrito. Por lo que dices debía ser una excelente persona, siempre es una dicha conocer a alguien que sea capaz de transmitir vivencias, de transmitir alegría y ánimo en un mundo en el que por desgracia se carece de muchas de estas virtudes. No dudo de que con su recuerdo te seguirá ayudando y seguiréis los dos arreglando el mundo, como te solía decir.
ResponderEliminarMe encanta el boniato y el membrillo y todo lo que le has puesto. La boca se me ha hecho agua al ver el aspecto que tiene esta compota y lo que lamento es no poder saborear esa delicia. Debe estar tentadora.
Un abrazo.
Juan, después de un tiempo he podido reanudar las respuetas a los comentarios, no me está resultando nada fácil, pero quiero hacerlo.
EliminarLo defines muy bien, la comunicación que existía entre nosotros era muy especial. Soy consciente de que es irrepetible, doy gracias por haber tenido esta maravillosa experiencia.
Feliz semana. Bstes.
Hola Emma, siento mucho la pérdida de esta persona tan querida. Con esta receta le has hecho un homenaje muy bonito. Las dedicado una preparación dulce y deliciosa, que por cierto encuentro riquísima con esta combinación de ingredientes. Mucho ánimo, un beso.
ResponderEliminarSilvia, no te puedes imaginar cómo disfrutaba de esta compota, era muy goloso.
EliminarFeliz semana. Bstes.
Siento mucho que hayas perdido a un gran amigo.
ResponderEliminarMuchas veces he llegado a pensar que las personas realmente buenas de corazón, son las elegidas y las que primero se separan de nosotros, quizás quieran seguir ejerciendo su labor desde el cielo, es el único consuelo que me queda.
En cuanto a esa compota, no dudo de que tiene que estar riquísima, todos los ingredientes que lleva me encantan, lo que sí tendré algo más difícil es encontrar los boniatos.
Te dejo un fuerte abrazo con mis cariños.
Kasioles
Ah! De esta vez no he tenido ningún problema para poder comentarte. Gracias.
Kasioles, mi amigo Paco era un ser excepcional; pasó por la vida haciendo el bien. Estamos en Semana Santa, y a fecha de hoy no he elaborado ninguna torrija. Está tan presenta cuánto le gustaban que lo tengo que superar.
EliminarFeliz semana. Bstes.
Siento esta perdida, animo, estas recetas son las que no se deben perder, besos
ResponderEliminarAdita, muchas gracias. Hay que seguir caminando.
EliminarFeliz semana. Bstes.
Hola Enma, siempre comento que las recetas que nos traen algún recuerdo especial siempre son las mejores, parece que uno les ponga más cariño cuando las hace. Ese vínculo sentimental la hace aún más rica cuando saboreas estos platos tradicionales... Por cierto, hace un siglo que no voy a Alcalá de los Gazules.
ResponderEliminarVeo que tú también has sufrido la pérdida de una persona querida, así que también te mando mucho ánimo y agradezco de corazón el cariño de tu último comentario. Mantener los recuerdos es importante, de alguna forma es hacer que estas personas permanezcan vivas entre nosotros para siempre.
Te mando mucho ánimo y un abrazo enorme
Javier, cunado se marcha un ser muy querido para nosotros, nunca lo hace del todo; sigue viviendo en nuestro pensamiento, y nuestro corazón.
EliminarFeliz semana. Bstes.
Emma me envias un tapper grandote?? jjjjjjj
ResponderEliminar1 saludito
Gracias por tu visita.
EliminarUn saludo.